jueves, 5 de junio de 2014

El primer día del resto de mi vida.




Quiero vivir, quiero gritar, 
quiero sentir el universo sobre mí 
Quiero correr en libertad, 
quiero encontrar mi sitio.

El Universo sobre mí (Amaral)



Sí, hoy es el primer día del resto de mi vida. 
Un punto de inflexión que quedará marcado para siempre. 
Un antes y un después. 

Es increíble, pero ya ha pasado.
Se acabó, aunque todavía no soy consciente. Sigo sin creérmelo. Mi cerebro sigue preocupado por las ingentes cantidades de apuntes, libros, y cuadernos que hay todavía sobre mi escritorio. 

Hoy al salir del último examen de PAU, podía sentir la libertad, la palpaba en las puntas de mis dedos, la veía a través de mis ojos, algo vidriosos, que reflejan únicamente alegría.   También la he sentido mientras bajaba las escaleras a todo correr del Edificio Científico Tecnológico y abrazada a mis tres amigos "veteranos". Ellos primero de ADE, y ella tercero. Los muy "malos" ya habían pasado por todo esto. Cómo se han reído de mí, de mis nervios, y de mi histerismo durante todos estos días. Eso sí, son los mejores dando consejos a una tonta como yo. Cómo no, hemos celebrado el apoteósico final yendo de compras (ellos obligados) y tomando algo en una terracita al sol. ¡Hay que ir empezando ya a coger moreno! Que hemos perdido mucho tiempo todo este mes de mayo sin salir apenas de casa. 

Ahora sólo pienso en lo que queda por delante. En estos tres magníficos meses, que a pesar de estar interrumpidos por el examen de "Advanced" van a ser los mejores de toda nuestra vida. Y qué mejor manera que empezar el verano que con ella, con mi amiga, mi compañera de historias, con la que he crecido, he vivido y he soñado. Llevábamos mucho tiempo esperando este viaje. Va a ser genial. Y luego Asturias, y vuelta al pueblo, las dos juntas, como siempre, como uña y carne, inseparables. Creo que le va a gustar tanto La Rioja que espero que se plantee venirse a estudiar aquí. ;) 


Llevábamos muchísimo tiempo esperando este momento. Ahora todo ha merecido la pena. Todo tiene sentido. Por los lloros y lágrimas, los agobios,  por todas las noches de estudio, los "cabreos", los instintos asesinos, los nervios, el frío del invierno en el Sagasta, los carnavales en los que el BI no nos dejó salir, las fiestas que nos perdimos... También por todos los maleficios que echamos al Bachillerato Internacional, por las veces que maldecimos el habernos metido, y por haber aprendido a sobrellevar las cosas, a reírnos, y a improvisar. 
Hay que recuperar el tiempo perdido, o igual no tan perdido, porque en cada uno de estos momentos hemos estado juntas, apoyándonos las unas a las otras y tomándonos todo con humor, que al fin y al cabo en eso consiste la vida. 

Va por vosotras, compañeras de vida.